Juan Carlos de Pablo, profesor de las argentinas universidades del UCEMA y UDESA, es el autor de este trabajo, en el que narra la historia de la Escuela de Chicago, sobre sus protagonistas y las influencias que generó.

La Universidad de Chicago nació debido a una donación efectuada por John Davidson Rockefeller y abrió sus puertas en 1982. Según el autor de este paper, la tradición de la Casa de Estudios se debe en gran medida a su primer presidente, William Rainer Harper. Para Henry Schultz, el núcleo de la Escuela de Chicago EC reside en el convencimiento del poder analítico y la capacidad de predicción de la teoría neoclásica de los precios.

“La gran innovación de la EC fue la idea de que buena parte de la actividad política se la entiende como si se desenvolviera a través de un proceso de mercado, y por consiguiente moldeable según la teoría neoclásica” (Van Horn y Mirowski, 2010).

La historia de los profesores del departamento de Economía de la Universidad de Chicago, centrada en Milton Friedman, se divide en 3 etapas.

 

RESUMEN: Este trabajo fue escrito por alguien que nunca pisó la universidad de Chicago, y estudió en Harvard. Quienes dedican sus energías a pegarle a los economistas encuentran facilitada su tarea en el caso de la universidad de Chicago. No solamente porque fue fundada por un Rockefeller, y contó entre sus profesores a Milton Friedman, sino también gracias al aporte de muchos egresados de las escuelas de economía de las otras universidades. La presentación busca superar el plano de la caricatura, para ubicarse en la realidad.

Si Roy Forbes Harrod pudo escribir una notable biografía de John MaynardKeynes, publicada en 1951, sin pertenecer al “circo” que rodeaba a este último (integrado por Joan Violet y Edward Austin Gossag Robinson, Richard Ferdinand Kahn, James Edward Meade y Piero Sraffa) y ni siquiera ser de Cambridge sino de Oxford, quien esto escribe –que nunca pisó la universidad de Chicago, y estudió en Harvard- bien puede intentar un análisis sobre el rol que la “escuela de Chicago” jugó y juega en Argentina que influyó en toda Sudamérica.

Pegarle a los economistas, apuntándole a las caricaturas, es un deporte mundial. Sólo al guionista y al director de “Una mente brillante”, la edulcorada versión cinematográfica basada en la biografía de John Forbes Nash, escrita por Nassar (1998), se le puede ocurrir que, después de leer la monografía que Nash escribió sobre negociaciones, un profesor de economía de Princeton le pudo haber dicho: “usted se da cuenta que con esto destruye un siglo y medio de análisis económico”.

Quienes dedican sus energías a pegarle a los economistas encuentran facilitada su tarea en el caso de la universidad de Chicago. No solamente porque fue fundada por un Rockefeller, y contó entre sus profesores al pendenciero Milton Friedman, sino también gracias al aporte de muchos egresados de las escuelas de economía de las otras universidades.

Tal como el lector espera, la presentación que sigue busca superar el plano de la caricatura, para ubicarse en la realidad. Si se hubiera ubicado en el de la caricatura, hubiera sido calificada como maravilla o pasquín, por parte de los “Chicagomaníacos” y los “Chicagofóbicos” (respectivamente o a la inversa, dependiendo del tenor). Pero que trate de reflejar la realidad no impidió que, a partir de la versión preliminar, me juntara con una notable cantidad de pareceres conflictivos entre sí, que incorporé al texto según mi leal saber y entender. Cada uno calculará la medida en que lo logré; por mi parte estoy satisfecho con la repercusión que generaron estas líneas, satisfacción que surge del hecho de que, para mí, la publicación de cualquier escrito es simplemente una nueva fase de la reflexión y la conversación, y sólo con el tiempo sabremos si se trata de la versión “final”.

El capítulo está dividido en 4 secciones y un apéndice. En la primera se historia a la Universidad de Chicago (en adelante, UC) y su departamento de economía; en la segunda se analiza la influencia que la UC ejerció sobre sus alumnos, y sobre la profesión en general a través de sus publicaciones; en la tercera se le presta atención a la tarea que realizaron en Argentina los graduados en la UC, luego de haber pasado por la referida casa de estudios; y en la cuarta se presentan las reflexiones finales. En el apéndice se reseñan las principales escuelas económicas.

 

1.- LA UNIVERSIDAD DE CHICAGO Y SU DEPARTAMAMENTO DE ECONOMÍA

Los comienzos, 1ª etapa:

La UC nació gracias a una donación efectuada por John Davison Rockefeller y abrió sus puertas en 1892 “Las características básicas de la tradición de Chicago son las siguientes: una fuerte ética laboral, una firme creencia de que el análisis económico es una verdadera ciencia, la excelencia académica como único criterio para escalar posiciones, una cultura centrada en el debate, orientada a afilar el pensamiento crítico, y el aislamiento de la universidad con respecto a la ciudad de Chicago. En buena medida esta tradición se debe a William Rainer Harper, primer presidente de la universidad, quien en 1907 falleció de manera inesperada… Según Henry Schultz, el núcleo de la Escuela de Chicago reside en el convencimiento del poder analítico y la capacidad de predicción de la teoría neoclásica de los precios” (VO, 2007). “La gran innovación de la EC fue la idea de que buena parte de la actividad política se la entiende como si se desenvolviera a través de un proceso de mercado, y por consiguiente moldeable según la teoría neoclásica” (Van Horn y Mirowski, 2010).

“El impacto de la EC, no sólo sobre el análisis económico sino también sobre la sociedad y el gobierno americanos, es verdaderamente sorprendente… Los economistas de Chicago han exhibido de manera consistente coraje para plantear cuestiones que al menos inicialmente le resultaban ofensivas cuando no indignantes para buena parte de la opinión convencional, incluyendo a buena parte del pensamiento progresista. Esta irreverencia fue una marca registrada en la carrera de Milton Friedman… Friedman nació proselitista” (Nelson, 2001).

Centrada en Milton Friedman, la historia de la obra de los profesores del departamento de economía de la UC se divide en 3 etapas: la primera va desde la creación de la universidad hasta la segunda mitad de la década de 1940, la segunda desde entonces hasta 1976, y la tercera desde allí en adelante Primera etapa. “Los padres fundadores del departamento de economía de la UC fueron James Laurence Laughlin, Thorstein Veblen, John Maurice Clark, Leon Carroll Marshall, Frank Hyneman Knight y Aaron Director” (VO, 2007). “También integraron la ‘primera EC’ Jacob Viner, Henry Simons, Henry Schultz, Lloyd Mints y Oskar Ryszard Lange” (Rutherford, 2010).

Primer director del departamento de economía, Laughlin “fue uno de los economistas monetarios más influyentes entre la década de 1880 y la fundación del Sistema de la Reserva Federal (FED) en 1913… Aunque conservador, se oponía a la teoría cuantitativa del dinero. Planteó una versión de la ‘teoría de los pagarés reales’…

Durante la Gran Depresión la economía monetaria en Chicago no era ni científica ni políticamente homogénea” (Laidler, 2010).  “Para Knight nada era sacrosanto… Aunque de temperamento diferente, Director tenía la talla intelectual de Knight” (VO, 2007). “Según James Buchanan, la organización económica de Knight [1933] contiene los elementos teóricos que ayudaron a ubicar a Chicago como piedra angular de la economía neoclásica… Fue el primero que utilizó el diagrama de flujo circular para interpretar la simultánea interacción entre los individuos y las empresas, en los mercados de bienes y factores” (Emmett, 2010a). En su tesis doctoral, publicada en 1921, explicitó la diferencia que existe entre riesgo e incertidumbre.

“No existió economista neoclásico más grande que Viner… Sus contribuciones a la teoría del comercio internacional son colosales… Era un gran ecléctico” (Samuelson, 1972). “Sus principales aportes a la teoría son 2: la relación entre la curva de costos y la de oferta, y un bosquejo de la teoría de la competencia monopólica, anticipando los trabajos de Joan Robinson y Edward Hasting Chamberlin” (Spiegel, 1987). En la teoría del comercio internacional, en 1950 diferenció entre creación y desvío de comercio, importantísima idea para evaluar cualquier proceso de liberalización económica regional, o que no abarca al mundo entero. “Para muchos UC e institucionalismo lucen antitéticos… pero en sentido amplio el análisis económico que se practica en Chicago siempre fue institucional… Hasta 1918, por el departamento de economía de la UC pasaron virtualmente todos los asociados de manera estrecha con la creación del movimiento institucionalista: Veblen, Robert Franklin Hoxie, Wesley Clair Mitchell, Walton Hale Hamilton y Clark” (Rutherford, 2010). Veblen “es principalmente conocido como un sarcástico crítico social, básicamente por La teoría de la clase ociosa, que publicó en 1899. Pero también era un economista. Fue el primer editor del Journal of Political Economy, la revista especializada en economía que publica la UC… Influyó sobre el pensamiento económico a través de algunos de sus estudiantes-discípulos, como Mitchell y Clark” (Sowell, 1987). Su influencia directa también fue limitada porque enseñó en la UC entre 1892 y 1906. “Entre 1939 y 1941 fui asistente y amigo personal de Lange… El fallecimiento de Henry Schultz, en un accidente automovilístico en 1938, elevó a Lange a la categoría de economista matemático y econometrista jefe, del departamento de economía… Por su carácter era la persona grata para todos” (Reder, 1982). “Junto con Marek Breit, en 1934 planteó el primer bosquejo del funcionamiento de una economía socialista” (Kowalik, 1987), participando en la segunda etapa de lo que se conoce como la controversia socialista.

 

Segunda etapa

“A partir de fines de la década de 1930 ocurrieron muchos cambios. En 1938 murió Schultz, a partir de 1939 Douglas se involucró en la política y la Comisión Cowles llegó a Chicago, en 1940 se retiró Harry A. Millis, en 1943 se incorporó Theodore Wilhain Schultz, en 1945 Lange se fue de Chicago y en 1946 Viner” (Rutherford, 2010). En 1946 se incorporó Friedman, en 1947 Lloyd Appleton Metzler y recién en 1958 George Joseph Stigler.

Que lo que hoy denominamos la economía de Chicago, a mediados de la década de 1940 podría haber sido trasplantada [es decir, desarrollarse en otra localización] no es implausible. A Columbia, un claro ejemplo… Debido a su personalidad, Knight tenía muchos admiradores, pero pocos estudiantes.

Afortunadamente, algunos de ellos eran muy capaces: Friedman, Stigler y Allen Wallis… La transferencia de la primera a la segunda etapa se dio vía Knight, mucho más que a través de Viner, porque los alumnos de este último nunca constituyeron un club… Se esperaba que Lange jugara un gran papel en esta transición, cosa que hizo entre 1940 y 1945, pero al finalizar la Segunda Guerra Mundial abandonó la vida académica para volver a Polonia y desarrollar una carrera política” (Reder, 1982). “Friedman y Stigler son las principales figuras de la segunda etapa” (Nelson, 2001).

De inmediato agrupo los aportes, según diferentes campos de estudio. Moneda. “A fines de la década de 1920 Henry Calvett Simons volvió a ubicar la teoría cuantitativa entre las cuestiones importantes… Tanto Friedman como Patinkin lo califican ‘la figura dominante en las discusiones sobre política monetaria y fiscal en Chicago, durante las décadas de 1930 y 1940’” (VO, 2007). “Los comentarios bibliográficos que los economistas de Chicago hicieron de La teoría general fueron muy críticos, cuando no hostiles, y Knight operó para que Chicago no le otorgara un doctorado honorario a Keynes” (Laidler, 2010).

“En la imagen popular, la tradición monetaria de la UC está íntimamente vinculada con Friedman” (Laidler, 2010). “Una historia monetaria de los Estados Unidos, la obra que Friedman y Anna Schwartz publicaron en 1963, comenzó a ser elaborada en 1948, cuando Arthur Burns, entonces titular del National Bureau of Economic Research, le pidió a Friedman que analizara la relación entre la cantidad de dinero y el ciclo económico” (VO, 2007). “Es el libro más importante publicado luego de La teoría general… Friedman y Schwartz se complementaron, porque el primero era un teórico y la segunda una notable historiadora económica. Friedman trabajó en Chicago y Schwartz en Nueva York. Se comunicaban por correo” (Rockoff, 2010). “El estilo de pensamiento monetario que Friedman estableció en Chicago tiene antecedentes en Clark Warburton y en Lauchlin Currie… A fines de la década de 1960 la tradición monetaria de Chicago era más homogénea” (Laidler, 2010). De la obra escrita de Friedman también merecen mencionarse su ensayo sobre metodología de la ciencia económica (Friedman, 1953)14, su conferencia presidencial ante la Asociación Americana de Economía (Friedman, 1968), donde introdujo la curva de Phillips que incorpora las expectativas inflacionarias y la tasa natural de desempleo, la explicitación del esquema teórico dentro del cual hay que plantear el análisis monetario (Friedman, 1970) y la conferencia Nobel (Friedman, 1977).

 

Economía agrícola

Theodore Wilhain Schultz fue el fundador de una fuerte tradición de la UC sobre economía agrícola. Llegó a Chicago, junto a David Gale Johnson, a raíz del denominado “escándalo Bronwlee o escándalo de la margarina”. Lucio Graciano Reca, alumno de Schultz, aporta el siguiente testimonio (recogido en Pablo, 2008). “Fue una persona inolvidable. De una entereza, de una entidad moral, que he encontrado en muy poca gente. Sencillo, a la vez que exigente y riguroso con la gente que trabajaba con él, coherente en todos los aspectos de su vida.

Genuinamente preocupado por el destino de los agricultores más pobres y en cómo corregir el despilfarro de recursos que resultaba de las políticas anti-agrícolas que estaban de moda en numerosos países en desarrollo. En su juventud fue agricultor, en una zona bastante inhóspita. Fue pionero en el esfuerzo de integrar el análisis económico de los problemas de la agricultura en el marco de la economía global, movió las fronteras del estudio de la economía agrícola más allá de los clásicos estudios de administración rural, explorando las interacciones entre la agricultura y el resto de las actividades productivas. En La organización económica de la agricultura, que publicó en 1953, desarrolló lúcidamente estas ideas. Su enfoque frente al vasto tema de la pobreza rural puede resumirse en pocas palabras: “los pequeños productores son pobres pero eficientes”, lo cual se contrapuso al pensamiento convencional vigente hasta los años sesenta, que sostenía que los pequeños agricultores eran pobres porque no sabían usar sus recursos, y entonces había que “educarlos” mediante programas de asistencia técnica, etc. Es el tema de su libro Transformación de la agricultura tradicional (1964).

 

Economía laboral

“Las 2 universidades donde más se desarrolló la economía laboral durante el siglo XX son las de Chicago y Wisconsin. Sobre la base de paradigmas rivales: institucionalismo, en el caso de Wisconsin, neoclacicismo en el de Chicago… Harold Gregg Lewis es considerado el fundador de la economía laboral en la UC” (Kaufman, 2010). “Lewis, Albert Everett Rees, Sherwin Rosen y James Joseph Heckman, todos economistas de Chicago, mejoraron de manera significativa economía laboral como campo de estudio” (VO, 2007). Aquí también cabe mencionar a Edward Lazear. “La generación de tesis doctorales se aceleró en Chicago luego de 1940 y en las 3 décadas siguientes, en economía laboral, produjo más tesis que cualquier otra universidad” (Kaufman, 2010).

 

Mercados (financieros) eficientes

Los precios de los activos reflejan toda la información disponible. Eugene F. Fama dedicó su vida a extraer las implicancias de esta afirmación, arrancando con Fama (1963, 1965 y 1970). La denominada “hipótesis de la eficiencia de los mercados” cuestiona el valor del asesoramiento que se puede prestar en materia de composición y modificación de los portafolios. Tal como era de esperar, la hipótesis es objeto de acalorado debate.

Dentro del mismo campo de estudio, pero muchos años más tarde, corresponde citar los trabajos de Fisher Black y Myron Samuel Scholes, referidos a cómo calcular el precio de los derivados, dijo, no solamente sugiere conocimientos sino también coraje. Encaró su tarea trabajando con estudiantes de muchos países, con quienes recolectó y sistematizó información que mostró que el campesino “hace cálculo económico”, como cualquier mortal. También tiene el mérito de lograr que deje de considerarse al sector agrícola como algo especial, en vez de analizarlo con el herramental económico utilizado en el análisis del resto de los sectores.

Capital humano:

En Chicago, la economía del sector agrícola era la antesala del análisis del capital humano. “La investigación referida al capital humano no formó parte del análisis económico durante sus primeros 150 años de existencia” (Teixeira, 2010), pero cuando apareció “generó una revisión fundamental en la teoría del crecimiento económico” (VO, 2007). Jacob Mincer “‘descubrió’ la teoría del capital humano antes de que lo hicieran T. W. Schultz y Gary Becker, a quienes con frecuencia se les asigna el respectivo crédito” (Blaug, 1985). “Al comienzo de mi carrera formulé y apliqué el análisis de capital humano a la estructura de ingresos de los trabajadores [Mincer, 1958 y 1962]. Esto terminó de madurar en el libro que publiqué en 1974, donde los salarios fueron explicados con un modelo econométrico simple, que se volvió muy popular” (Mincer, en Blaug, 1999).

Si bien “Schultz no inventó el concepto de capital humano, su conferencia presidencial de la Asociación Americana de Economía (Schultz, 1961) dirigió tanto la atención de la profesión hacia ese campo de estudio, que bien podría ser denominado el ‘padre’ de la referida teoría” (Blaug, 1985). “Mejor sería calificarlo ‘el padre de la revolución del capital humano dentro del análisis económico’” (Bowman, 1980). En la referida conferencia afirmó: “aunque es obvio que la gente adquiere habilidades laborales y conocimiento, no lo es que estas habilidades laborales y conocimientos son una forma de capital, que ese capital es en buena medida el producto de inversiones deliberadas, y que en las sociedades occidentales el capital humano ha crecido a velocidades mucho mayores que el capital convencional (no humano), a la vez que dicho crecimiento puede ser la característica del crecimiento económico… Buena parte de lo que denominamos consumo es inversión en capital humano (ejemplos: los gastos en educación, salud y migración interna)… Los trabajadores no se volvieron capitalistas por la difusión de la propiedad de las acciones, como supone el folklore, sino adquiriendo conocimientos y habilidades que tienen valor económico… La rápida recuperación luego de la Segunda Guerra Mundial se explica porque el capital no humano estaba destruido, pero el capital humano no tanto. Por consiguiente, con aporte de capital no humano se pudo reconstruir rápidamente… Las actividades que mejoran las capacidades humanas son principalmente 5: salud; entrenamiento en el puesto de trabajo; educación formal; educación para adultos y migraciones”.

Si desea continuar la lectura de este paper puede hacerlo online haciendo clic aquí

 

Perfil Juan Carlos de Pablo

Juan Carlos de Pablo, profesor de las argentinas universidades del UCEMA y UDESA. Juan Carlos de Pablo (25 de noviembre de 1943) es un economista argentino. Estudió en la Universidad Católica Argentina entre 1960 y 1964 y luego continuó con su formación en Harvard. Es doctor honoris causa en la UCEMA y miembro titular de la Academia Nacional de Ciencias Económicas. También es columnista en el diario argentino La Nación.

Espacio publicitario